UNA VELA NO PIERDE NADA POR ENCENDE OTRA VELA. ¡¡¡PERO JUNTAS DAN MÁS LUZ!!!

He participado como asistente a la V Jornadas Regionales de Infantil. Me ha encantado!!!!! Me ha cargado de nuevas ilusiones comprobar que existen multitud de profesionales de la enseñanza de los "peques" que no se quejan de las dificultades, no se contagian del astió de su alrededor, y ... "no esperan a que pase la tormenta, sino que bailan bajo la lluvia".
¡¡¡¡La felicidad no es una estación, es una manera de viajar!!!!!
Enhorabuena a todos!!!! Y gracias!!!
Educar es lo mismo
que poner un motor a una barca,
hay que medir, pensar, equilibrar,
y poner todo en marcha.

Pero para eso,
uno tiene que llevar en el alma
un poco de marino,
un poco de pirata,
un poco de poeta,
y un kilo y medio de paciencia concentrada.

Pero es consolador soñar,
mientras uno trabaja,
que esa barca, ese niño
irá muy lejos por el agua.

Soñar que ese navío
llevará nuestra carga de palabras
hacia puertos distantes, hacia islas lejanas.

Soñar que cuando un día
esté durmiendo nuestro propio barco,
en barcos nuevos seguirá nuestra bandera enarbolada.
GABRIEL CELAYA